Encuentro en el marco de la muestra Palabra de Oesterheld y del mes de la memoria.

La idea del encuentro es presentar algunos trabajos que cruzan historieta con derechos humanos y pensar los desafíos que implica ya no trabajar con la ficción sino con la contemporaneidad, la historia reciente y las vivencias de personas de carne y hueso.

“La historieta ‒decía Héctor Germán Oesterheld‒ si se la hace bien, puede ser más que simple entretenimiento, puede ser la herramienta educativa del futuro”. El guionista estaba convencido de que los cuadritos podían servir como instrumento pedagógico, político y de militancia y así lo practicó: desde la primera historieta que incluyó dentro de un libro infantil o en las revistas Gatito, hasta sus guiones escritos desde la clandestinidad.

Se vuelve a pensar desde el quehacer actual la premisa oesterheliana con experiencias como las siguientes:

1) La niña comunista y el niño guerrillero es una novela gráfica en la que María Giuffra le da forma a la voz de diez hijas e hijos de desaparecidos –incluida su propia historia‒ que le contaron sus vivencias de infancia. Participan la artista plástica y Hugo Ginzberg, uno de los testimoniantes.

2) Una de las veces en las que Edgar Chacho Godoy –preso político durante la última dictadura militar‒ escuchó a alguien utilizar la palabra “puta” como insulto, decidió que era imprescindible contar su historia: la de las dos prostitutas que lo ayudaron en la cárcel y a las que luego mataron. Cuando empezó su historieta ni siquiera sabía el nombre de Ramona Suárez y Claridad González. Participan el autor, la investigadora Lauri Fernández y Teresita Sifón, integrante de la Asociación Mujeres Argentinas por los Derechos Humanos y amiga de una de las víctimas.

3) En ESMA el periodista Juan Carrá y el dibujante Iñaki Echeverría cuentan gráficamente lo ocurrido en el ex centro clandestino de detención y exterminio Escuela de Mecánica de la Armada. Participan los autores.

4) Desaparecidos y aparecidos es obra de la cooperativa e historietistas El Caburé y este título es el comienzo de una trilogía de novelas gráficas sobre secuestros y desapariciones ocurridas durante la última dictadura militar, a partir del relato de los sobrevivientes. Se contarán, por ejemplo, casos de detenidos del Departamento 2 de Informaciones Policiales de Mendoza y del Vesubio, entre ellos las vivencias de Susana Reyes, que compartió días de cautiverio con Oesterheld. Participan el dibujante Gabriel Bianchini, el guionista Héctor Bellagamba y la testimoniante Susana Reyes.

5) Hace ya varios años Pablo De Bella guionó y dibujó la búsqueda de Marcos Solsona para el proyecto Historietas por la identidad, impulsado por Abuelas de Plaza de Mayo. Y hace algunos meses Marcos encontró a su hermana y esa figura en blanco en las viñetas tiene ahora la cara y el cuerpo de Marcela. Radicada en España, grabó lo que representó para ella la historieta en una filmación que compartiremos como cierre de la actividad. Participan el dibujante e integrantes de la familia Solsona.