Fundación Pan Klub Museo Xul Solar es una institución dedicada a preservar y difundir la obra del artista argentino Alejandro Xul Solar. y tiene como objetivo desarrollar y promocionar la cultura en sus diversos aspectos. Fue creada en 1986 por Micaela (Lita) Cadenas; su esposa y por Natalio J. Povarché; marchand de Xul Solar, quienes decidieron fundarla respetando los planes originales del creador, a manera como éste había concebido el Pan Klub a fines de los años 1930.

El museo se inauguró el 13 de mayo de 1993 con las obras seleccionadas por el mismo Xul Solar y que son además, las que componen la muestra permanente de la colección, junto con objetos, esculturas y documentos que pertenecen a su archivo personal. Este mismo espacio funciona como centro cultural donde se realizan diversos eventos y exposiciones temporales dedicadas a difundir su obra. Asimismo, la Fundación conserva la vivienda personal del artista que guarda su biblioteca de aproximadamente 3.500 volúmenes.

La gestión de Elena Montero Lacasa de Povarché, directora del museo desde su apertura, buscó siempre resignificar la vida y obra de Xul Solar y continuar con el pensamiento original de la Fundación, que es el de trabajar para propagar el ideal al que aspiraba Xul Solar: querer que este mundo sea mejor para constituir una sociedad en armonía.

Es por esta razón y en el marco del festejo, se redefinió la colección permanente con un renovado criterio de exhibición y montaje diseñado por la curadora Cecilia Rabossi.

El conjunto de 86 obras que había sido planteado en 1993 en una línea cronológica, respetando los distintos períodos de la pintura de Xul, hoy la presentamos con una nueva narrativa, concentrando los distintos intereses desarrollados en su vida. Asimismo, a las obras de su colección permanente se incorporan en las vitrinas; documentos, libros, y escritos que orientan al espectador a la interpretación de su vasta producción cuya creatividad no ha tenido límites. 

Fue un gran honor y desafío repensar el guión curatorial del Museo Xul Solar, expresa Cecilia Rabossi.  Desafío porque debía partir de un elenco de obras establecido por el propio artista, imaginando por él para un futuro museo. A partir de este enunciado, el guión buscó presentar a Oscar Alejandro Schulz Solari (1887-1963), Xul Solar, en su dimensión total integrando lo astrológico, lo espiritual y lo utópico. Y desde esos tópicos, la obra se presenta a través de una serie de núcleos temáticos: Lo astrológico, Lo espiritual; Espacios para vivir; Escritura plástica y Búsquedas musicales que permiten generar nuevos diálogos.

Xul Solar pensaba en términos universales, le importaban todo y todo era susceptible de ser estudiado y transformado, o mejor dicho, recreado. Buscaba, por todos los medios, modificar los sistemas existentes de conocimiento para facilitar el aprendizaje, la comunicación y el entendimiento entre las personas. Estas reinvenciones de sistemas e instrumentos era una búsqueda permanente que, como afirmaba Jorge Luis Borges, lo llevo a trabajar en un “sistema de reformas universales”. Así creo dos lenguas (el neocriollo y la panlengua), una nueva escritura (grafías plastiútiles), transformo la anotación musical e instrumentos musicales (armonio, dulcitone, piano), modifico las cartas de tarot, el zodiaco, el I Ching, el ajedrez (panajedrez), sustituyo el sistema decimal por el duodecimal, imagino ciudades futuras, etc.

La palabra universal y sus sinónimos global, cósmico, colectivo, mundial, internacional, ecuménico explican y definen sus búsquedas y sus deseos que aspiraban, teniendo siempre la astrología como base, a tornar accesibles todos los sistemas. A través de la universalización de sus creaciones, Xul perseguía la fraternización de los hombres: “…En mi calidad de ciudadano del mundo sueño con una vida mejor que nos acerqué y nos torne más felices a todos los hombres del mundo sin distinción de credos ni de razas”.